¿Alguna vez te has sorprendido con una nueva mancha de pigmento en tu piel al despertar? Nada sorprendente en este regreso de vacaciones.
No importa qué tan bueno sea el protector solar, parece que a fines del verano recogimos algunas marcas más en la piel que parecía protegida.
Desafortunadamente, cuanto más envejecemos, más daño solar se acumula y se materializa naturalmente en hiperpigmentación.
Este tipo de decoloración puede desarrollarse en la cara, las manos, el escote, los hombros y, en realidad, en cualquier lugar donde haya tenido una exposición prolongada.
Para cuidar tu piel, parece importante consultar a un cirujano después del confinamiento que podrá tenerte preparado un tratamiento de ataque integrando cosmética a medida, un peeling específico o un tratamiento láser de alta tecnología…
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